Refuerza tus defensas inmunitarias (parte 1/2)

Cómo reducir la inflamación y pasar un invierno sereno

Descubre el funcionamiento de tu sistema inmunitario y aplica pautas sencillas de alimentación y de estilo de vida para prevenir enfermedades y optimizar tu salud.

Antes de saber cómo puedes reforzar tus defensas, hablemos del sistema inmunitario.

Sistema inmunitario

¿Qué es? Es un sistema biológico complejo, con un conjunto de elementos coordinados de reconocimiento y defensa que diferencian los elementos propios y no propios. Lo que se reconoce como no propio se destruye.

El sistema inmunitario protege y defiende el organismo contra agentes patógenos, externos o internos: microorganismos (virus, bacterias, parásitos), agentes tóxicos, infecciones, intoxicaciones, etc.

Otras agresiones al sistema inmunitario pueden ser físico-químicas: mecánicas (choques, caídas), climáticas (temperatura, altitud, sequía), agentes tóxicos, químicos (alcohol, tabaco, contaminantes, productos químicos). También pueden ser provocadas por otros seres vivos, como infecciones por virus, bacterias, hongos, levaduras y helmintos (gusanos).

Las agresiones externas e internas crean dos tipos de inflamación: la inflamación aguda y la crónica.

En el caso de la inflamación aguda, la agresión desencadena la rápida movilización del sistema inmunitario. La inflamación se resuelve de forma fisiológica.

Por lo que respecta a la inflamación crónica, la inflamación persiste en el tiempo por el mantenimiento del factor de agresión o por una disfunción del sistema inmunitario. Esta inflamación crónica de bajo grado puede producir una disminución o pérdida de función del órgano afectado, síntomas diversos, enfermedades inflamatorias o autoinmunes.

Otras fuentes de inflamación crónica pueden ser el estrés, los traumatismos físicos o emocionales, una alimentación desequilibrada o una alteración hormonal o del sistema digestivo.

Contra estos ataques, existen distintos tipos de barreras inmunitarias, como la piel, las mucosas, determinadas células de defensa pasiva y nuestra microbiota.

Los principales mecanismos de defensa del sistema inmunitario son:

  • El sistema inmunitario innato: tiene una acción rápida y natural mediante células inespecíficas que provocan una respuesta inflamatoria, seguida de una resolución fisiológica de la inflamación. Es perfecto en caso de caídas, heridas o quemaduras.
  • El sistema inmunitario adaptativo: está formado por células especializadas, con una respuesta más lenta y precisa.

En el próximo artículo, hablaré de lo que puedes hacer concretamente para reforzar tu sistema inmunitario, tus defensas inmunitarias, mediante pautas saludables de alimentación y estilo de vida.

 

Alice Dénoyers, dietista-nutricionista y PNI. @episalud

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